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domingo, 14 de octubre de 2012

Lo que queda de mí es mío.

Amélie había amanecido deseando con todas sus fuerzas que su amado se olvidara de ella. Quería un nuevo comienzo,lejos de él. Lo necesitaba tanto, que acabó por romper lo poco que aún les unía. No podía permitir helarse de nuevo.El deshielo tocaba a su puerta ,y había que ser muy fiera para ignorar eso.
"Se nos ha acabado el tiempo mi amor .Mira dónde estás,mira dónde estoy.Ya casi ni te puedo ver , y la verdad es que quiero que salga el sol .Esta vez soy yo la que quiere que las tormentas cesen.¿Que te parece si por esta vez,lo hacemos más fácil? Nos vamos como si nada,sin mirar atrás,los dos a la vez ."
Así,empezaba aquella carta de despedida .Así fue cómo por primera vez Amélie tomó iniciativa,rompió con todo y escribió el final permanente de la obra. Así fue cómo un trocito de su corazón embarcó en el avión ,dirreción Norte,Reykjavík. Así fue cómo una parte de ella,sigue helándose ,en Reikjavík.


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